El secretario general de las Naciones Unidas, António Guterres, ha expresado su profunda preocupación por la situación en Haití y ha pedido a la comunidad internacional que no olvide al país y que mantenga su solidaridad con su pueblo. Durante su visita a Haití, Guterres destacó el sufrimiento que enfrenta el pueblo haitiano debido a una crisis de seguridad, política y humanitaria causada por un déficit crónico de desarrollo.
Guterres condenó la violencia brutal de las bandas en el país, que afecta tanto a la vida pública como a la privada. Expresó su preocupación por la vulnerabilidad de la población, especialmente las mujeres y las niñas, ante estas bandas depredadoras. El secretario general hizo un llamado a prestar una atención urgente y sostenida a la situación, adoptando enfoques nuevos e integrados que prioricen a las víctimas y a la población civil.
Según Guterres, las soluciones propuestas deben abordar las cuestiones de seguridad, políticas, estado de derecho, y desarrollo humanitario. Destacó la importancia de restaurar las instituciones democráticas y mejorar la situación de seguridad para lograr una seguridad duradera y soluciones políticas representativas. Guterres subrayó la necesidad de un diálogo nacional inclusivo, con la participación de mujeres y jóvenes, para poner fin a la inseguridad y encontrar soluciones políticas duraderas.
El secretario general también hizo un llamamiento a la comunidad internacional para que intensifique su apoyo a la política nacional de Haití en términos de financiación, formación y equipamiento. Específicamente, solicitó al Consejo de Seguridad de la ONU que autorice el despliegue de una fuerza de seguridad internacional para ayudar a la Policía Nacional de Haití en la lucha contra las bandas y restaurar la autoridad del Estado.
En cuanto a la crisis humanitaria, Guterres señaló que la mitad de la población haitiana vive en la pobreza extrema, sufre de hambre y carece de acceso regular a agua potable. Denunció que el apoyo internacional no está a la altura de las necesidades y mencionó que el plan de respuesta humanitaria, que requiere 720 millones de dólares, solo está financiado en un 23 por ciento. Guterres hizo un llamado a la comunidad internacional para que brinde ayuda a las personas necesitadas en Haití, subrayando que es una cuestión de solidaridad y justicia moral.
En resumen, el secretario general de la ONU, António Guterres, ha pedido que se restaure el orden democrático en Haití lo antes posible y ha solicitado apoyo internacional para abordar la crisis de seguridad, política y humanitaria que enfrenta el país. Además, ha instado a la comunidad internacional a intensificar su solidaridad con el pueblo haitiano y a proporcionar ayuda humanitaria para hacer frente a la pobreza extrema y la falta de agua en el país.