Acabar con la mutilación genital femenina en 2030
«Unamos nuestras fuerzas para que la mutilación genital femenina pase a la historia y garanticemos un futuro más brillante, más sano y más justo para todas las mujeres y niñas del mundo».—Antonio Guterres, Secretario General de la UNU
La mutilación genital femenina (MGF) es una práctica que implica la alteración o lesión de los genitales femeninos por motivos no médicos y está reconocida internacionalmente como una violación grave de los derechos humanos, la salud y la integridad de las mujeres y las niñas.
Puede causar complicaciones de salud a corto y largo plazo como dolor crónico, infecciones, excesivos sangrados, mayor riesgo de transmisión del VIH, ansiedad y depresión, complicaciones durante el parto o infecundidad.
A pesar de que esta práctica se concentra en cerca de 30 países de África y de Oriente Medio y Asia meridional, así como algunos países asiáticos (India, Indonesia, Iraq y Paquistán) y algunas pequeñas comunidades de Latinoamérica, es un problema universal. También persiste en las poblaciones emigrantes que viven en Europa Occidental, en Norte América, Australia y Nueva Zelanda.
En los últimos 30 años, la prevalencia de la mutilación genital femenina ha disminuido en todo el mundo. En la actualidad, una niña tiene un tercio menos de probabilidades de sufrirla que hace 30 años. Sin embargo, las crisis humanitarias como los brotes de enfermedades, el cambio climático o los conflictos armados, entre otras, podrían hacer peligrar el mantenimiento de estos logros y consecuentemente hacer retroceder los avances hacia la consecución de la igualdad de género y del fin de la mutilación geniral femenina para 2030.
Más de 200 millones de niñas y mujeres han sufrido mutilación genital femenina. Este año, casi 4,4 millones de niñas correrán el riesgo de sufrir esta práctica nociva; lo que equivale a más de 12.000 casos diarios.
Cuando quedan cinco años para que finalice la década de acción, nuestras actuaciones colectivas deben centrarse en la creación de entornos en los que las niñas y las mujeres puedan ejercer su poder y su capacidad de elección, disfrutando plenamente de sus derechos a la salud, la educación y la seguridad. Sus voces y acciones pueden transformar normas sociales y de género profundamente arraigadas, permitiendo a niñas y mujeres hacer realidad sus derechos y su potencial en términos de salud, educación, ingresos e igualdad.
Para promover la eliminación de la mutilación genital femenina se necesitan esfuerzos coordinados y sistemáticos que involucren a comunidades enteras y se centren en los derechos humanos, la igualdad de género, la educación sexual y la atención a las necesidades de las mujeres y niñas que sufren sus consecuencias.
2025: Redoblar esfuerzos
Fortalecer las alianzas y crear movimientos para acabar con la Mutilación Genital Femenina
En 2012, la Asamblea General de las Naciones Unidas designaron el 6 de febrero como el Día Internacional de Tolerancia Cero con la Mutilación Genital Femenina, con el objetivo de amplificar y dirigir los esfuerzos en la eliminación de esta práctica. Durante más de diez años, el Programa Conjunto ha apoyado a las supervivientes de la mutilación genital femenina, dando prioridad a las inversiones en iniciativas dirigidas por las supervivientes, centradas en el empoderamiento, la capacidad de acción y el acceso a los servicios esenciales.
Durante más de una década, el programa conjunto ha apoyado a las supervivientes de la mutilación genital femenina, dando prioridad a las inversiones en iniciativas dirigidas por las propias víctimas, centradas en el empoderamiento, la capacidad de acción y el acceso a servicios esenciales. Existe una necesidad urgente de esfuerzos aún más concretos, coordinados, sostenidos y concertados si queremos alcanzar nuestro objetivo común de poner fin a la mutilación genital femenina para 2030.
Súmate a nuestro llamamiento a la acción el 6 de febrero de 2025. Muestra tu apoyo en las redes sociales para #AcabarConLaMutilaciónGenitalFemenina (#EndFGM). Usa las etiquetas en inglés #Unite2EndFGM (Unidos para acabar con la MGF) y #EndFGM y los materiales promocionales del tablón de Trello.
Cómo luchamos desde las Naciones Unidas
Aunque la práctica se ha mantenido por más de mil años, se puede acabar con la mutilación genital femenina en una sola generación es todavía posible si aceleramos el proceso. Por este motivo, las Naciones Unidas se han propuesto su completa erradicación para 2030, en consonancia con el espíritu del Objetivo de Desarrollo Sostenible 5.
Para ello cuenta desde 2008 con el mayor programa mundial para acelerar la eliminación de la MGF dirigido por el Fondo de Población de las Naciones Unidas y UNICEF. Ese programa se centra en la actualidad en 17 países africanos principalmente.
A lo largo de los años, esta asociación ha cosechado notables logros. Gracias al apoyo del programa conjunto, más de 7 millones de niñas y mujeres han recibido servicios de prevención, protección y atención relacionados con la mutilación. Más de 50 millones de personas han hecho declaraciones públicas para abandonar esta práctica, y los medios de comunicación han llegado a más de 250 millones de personas. En los últimos dos años, cerca de 12.000 organizaciones y 112.000 sanitarios de las comunidades han trabajado para impulsar el cambio.
A día de hoy esta colaboración ha conllevado importantes logros. Hasta el año pasado, dicho Programa apoyaba a más de 11.000 organizaciones, de las cuales el 83 % eran organizaciones de base que colaboraban con coaliciones y movimientos dirigidos por supervivientes, abogaban por cambios en las políticas y las leyes, y defendían cambios en las normas sociales y de género.
Publicado originalmente en portal web de Naciones Unidas
(fuente: Informe anual 2022 sobre la MGF).