Por CNN Español
Existe un fenómeno meteorológico al que históricamente se le ha asociado con desastres, inundaciones y daños en general por las precipitaciones. Se trata de la DANA y coloquialmente se le conoce como “gota fría”.
Pese a esta asociación, la DANA está lejos de ser un sinónimo de desastre y, más bien, se trata de un evento ocasional entre junio y octubre en el Mediterráneo, como explica la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET, antes Instituto Nacional de Meteorología) de España.
¿De qué se trata? A continuación, te damos una explicación de este fenómeno.
¿Qué es una DANA o “gota fría”?
El INM señala que DANA son las siglas para referirse a Depresión Aislada en Niveles Altos.
La DANA “es una depresión (o borrasca) aislada en niveles atmosféricos altos, formada por aire frío”.
Cabe recordar que, en meteorología, una depresión es “una zona donde la presión atmosférica es más baja que la del aire que la rodea”, según la Universidad Complutense de Madrid, lo cual suele generar nubosidad, lluvias y vientos.
En las DANA ocurre una depresión aislada en niveles altos.
¿Por qué se dice que es aislada en niveles altos? Esta depresión se desprende de un cinturón de vientos establecido en la troposfera y la baja estratosfera. Estos cinturones pueden ser el chorro polar o el chorro subtropical, donde el aire es frío, dice la AEMET.
Estas corrientes de aire en chorro suelen dar vueltas a la Tierra, pero su movimiento no es en línea recta, sino que tiene ondulaciones, que a veces son tan pronunciadas que una porción de masa de aire se estrangula y se corta, aislándose del flujo original, explica la AEMET.
Esta masa de aire frío que se cortó y se aisló del chorro original es la DANA y flota a niveles más bajos, lo que puede generar precipitaciones y vientos fuertes.
“Cuando una de esas ondulaciones o meandros (vaguadas, en el argot meteorológico) se amplifica mucho puede llegar a estrangularse y cortarse, quedando formada la depresión aislada fría o gota fría. Nótese que la gota fría es aire polar flotando sobre latitudes inferiores a las que normalmente ocupa ese aire frío”, señala la AEMET.
La AEMET hace énfasis en que la DANA no es sinónimo de desastre natural, pues se trata de un evento ocasional en el verano y otoño boreales sobre zonas como el Mediterráneo.
Una DANA puede traer afectaciones serias debido a las fuertes lluvias y vientos, pero esto no es así siempre. De hecho, son menos las veces que la DANA causa grandes daños, indica la AEMET.
La DANA, por tanto, no debe ser motivo de alarmismo sin sentido, sino más bien de alerta y precaución.